Los Colleges forman parte de la Universidad de Cambridge (y la de Oxford, y un par más, menos famosas), de una manera peculiar y distinta que en todas las demás universidades. Son comunidades de alumnos y profesores, que allí viven, estudian, trabajan y socializan. Por supuesto, también existen las facultades, departamentos, laboratorios e institutos, donde se lleva a cabo la mayor parte de la investigación y la docencia. Pero en los Colleges es donde los alumnos pasan sus años de estudiantes, incluso disfrutando de tutorías pesonalizadas con un profesor. A Trinity College se unió Isaac Newton en 1660, a los 17 años, cuando terminó la Grammar School en Grantham, que contamos la semana pasada. Su madre, Hannah, quería que Isaac volviera a la granja familiar. Pero cada vez que le encargaba alguna tarea de campo, Isaac la embarraba: se le escapaban las ovejas o los chanchos, se olvidaba de traer de vuelta el caballo, y cosas por el estilo. Además, el hermano de Hannah había estudiado en Cambridge, y también el cuñado del farmacéutico donde Isaac se alojaba en Grantham, que era fellow de Trinity, y debe haber pescado el valor del muchacho, que no paraba de fabricar máquinas de madera. Así que Hannah dijo "y bueno", y a Trinity marchó el chico.
Isaac se graduó de Bachelor en 1665, justo antes de que la universidad cerrara a causa de la peste. Así que volvió a casa de su madre, donde permaneció durante un año y medio, período durante el cual inventó el cálculo infinitesimal, reformuló las ciencias de la óptica y la mecánica, y descubrió la ley de la gravitación universal. Ya hemos contado estas cosas. Al finalizar su "año milagroso" Isaac regresó a Trinity, fue elegido fellow en 1667 y obtuvo su grado de Master of Arts en 1668. Empezó a mostrarle sus trabajos al profesor de matemáticas, Isaac Barrow, quien inmediatamente se dio cuenta de que el joven era un genio. En 1670 renunció a su cátedra en favor de Newton, que se convirtió así en Lucasian Professor, y se mudó a un departamento que se encuentra en este edificio, junto a la entrada principal de Trinity.
Allí vivió 26 años, hasta que lo nombraron algo así como "presidente del Banco Central" y se mudó a Londres. Visto desde afuera del edificio, el departamento de Newton se ve así, con un pequeño jardín donde también crece un retoño del famoso manzano.
No visité el departamento (no se puede, sigue funcionando como alojamiento de un profesor), pero sí la Biblioteca Wren, donde se exhiben varias reliquias de Newton. Fue Barrow el que convenció a Christopher Wren, arquitecto, astrónomo, fundador de la Royal Society y amigo de Newton, de que diseñara una nueva biblioteca para Trinity. Es una preciosidad, de un estilo neoclásico muy distinto del gótico de los edificios antiguos de los Colleges.
En el fondo vemos una ventana de vitreaux, obra muy posterior, de un artista inmigrante italiano llamado Giovanni Battista Cipriani:
Allí está Fama, la Musa de Trinity, presentándole a Newton al rey George III (el que le regaló a Manuel Belgrano el reloj de oro que usó para pagarle a su médico en su lecho de muerte). Detrás de éste está Britannia, vestida como Pallas Atenea, y al frente otro exalumno glorioso, Francis Bacon, tomando nota y mirando de frente.
Entre las reliquias en exhibición están su bastón, un mechón de pelo, una libretita de gastos, instrumentos de dibujo, cositas que mostraré otro día. Pero además tienen su propio ejemplar de la primera edición de los Philosophiae Naturalis Principia Mathematica, la obra fundamental de la Revolución Científica del siglo XVII:
El libro tiene abundantes anotaciones en los márgenes:
Incluso hay muchas correcciones en el texto. Vean por ejemplo estos dos cuadratus enmendados con cubus. Así que ya saben, si la copia de ustedes de los Principia es una primera edición, ¡ojo que tiene errores!
En los Principia, Newton estableció las leyes fundamentales del movimiento de los objetos materiales. Todos: desde las manzanas hasta los cuerpos celestes, en la primera gran unificación de las leyes de la física. Hoy parece una pavada, pero en el siglo XVII fue una revolución, que desató el fenomenal desarrollo de las ciencias físicas, que desembocó en la increíble civilización tecnológica que disfrutamos hoy.
Newton compuso los Principia en Trinity. Pero las leyes del movimiento físico no fueron las únicas escritas allí. En 1863 un grupo de sportsmen de Trinity escribieron unas reglas para un juego deportivo y las publicaron en el diario, con el anuncio de que el primer partido se jugaría el viernes 20 de noviembre a las dos y media de la tarde, en el parque llamado Parker's Piece. Fue el primer partido de fútbol moderno. Fue aquí:
En diciembre de ese año se creó la Football Association, que adoptó las Reglas de Cambridge. Hay que decir que los pibes venían pateando la pelota en Trinity desde hacía siglos, pero las reglas cambiaron todo. ¿Habrá jugado Newton algún picadito? Hay evidencia de que iba al pub y jugaba a las cartas, al tenis y a las bochas, pero no sé si se le daba por el balompié.
Trinity College: allí se escribieron las reglas de la física, y las del fútbol. Qué más.
Si leyeron recientemente sobre un error de interpretación de la Primera Ley de Newton, diré solamente que es algo mucho menos relevante y trascendente que lo que los títulos sensacionalistas intentaron transmitir. Tal vez lo comente en algún momento, pero ni sé si vale la pena.
Muy poco después, el 20 de junio de 1867, se jugó el primer partido de fútbol en la Argentina. ¿Dónde? En el parque donde hoy está el Planetario Galileo Galilei.
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