El 10 de febrero pasado la Luna llena salió eclipsada en Bariloche:
¿Cómo que no está eclipsada? Fue un eclipse penumbral, como ya explicamos. A pesar de la explicación, y de la insistencia de que se trataba de un efecto sutil, escuché voces quejándose de que no vieron nada. "¡No vi el eclipse!" me dijeron. Y bueno: el que no mira, no ve. He aquí una secuencia de fotos mostrando la evolución del eclipse. En la última imagen, a las 23 horas, la Luna ya había recuperado su lustre habitual de la fase llena. Todas las fotos están tomadas con la misma exposición fotográfica.
Hay varias cosas notables en esta secuencia. En la primera foto se ve el aplanamiento de la Luna cuando estaba todavía cerca del horizonte, por efecto de la refracción de la luz en la atmósfera. En segundo lugar, se aprecia el tono rojizo, debido a que la luz penumbral está filtrada por la atmósfera de la Tierra. Es el mismo fenómeno que da el conocido color ladrillo a los eclipses totales, pero mucho más atenuado. En tercer lugar... ¡El máximo del eclipse me quedó atrás de unas nubes! ¡GRRR!...
También puede verse cómo la sombra parece ir rotando alrededor de la Luna, ya que la penumbra no es homogénea, sino que la región interior es más oscura. Aquí puse una selección con tres imágenes, señalando el punto más oscuro:
La Luna pasó muy cerca de la región central de la sombra de la Tierra (la umbra) en este eclipse. Podemos verlo en Cartes du Ciel:
La brecha entre el borde de la Luna y el de la umbra (el círculo rojo) es de apenas un minuto veinte segundos de arco. Es fácil calcular que son sólo 150 kilómetros. ¡La Luna mide 3200 km de diámetro, y pasó a apenas 150 de la sombra de la Tierra! Rara vez los eclipses penumbrales son tan interesantes.
El próximo eclipse lunar visible desde Sudamérica será el 27 de julio de 2018, el año que viene. Será un eclipse total, del cual veremos solamente la fase parcial del final, con la Luna saliendo sobre el horizonte. Son mis favoritos. ¡Ampliaremos!
Este eclipse de Luna fue parte de la misma temporada de eclipses del solar anular de ¡mañana domingo 26 de febrero! No te lo pierdas.
25/02/2017
18/02/2017
Supersol contra Miniluna
¿Por qué el eclipse de la semana que viene es ANULAR? Las órbitas de la Tierra alrededor del Sol y de la Luna alrededor de la Tierra no son redondas, son ovaladas. Así que a veces la Luna se ve un poco más grande (la famosa Superluna, cuando coincide con la luna llena) o más chica, y también el Sol. El eclipse del próximo 26 de febrero ocurre a menos de dos meses del Supersol del perihelio (el momento más cercano del año el pasado 4 de enero), así que todavía está bastante grande. Y la Luna estará a mitad de camino entre el apogeo (máximo alejamiento) y un perigeo (máximo acercamiento) bastante lejano. Así es: los perigeos no son todos iguales; por eso en noviembre del año pasado se habló de una Superluna especial...
El resultado es que la Luna, en el momento del eclipse, no alcanzará a tapar el Sol por completo ¡por muy poquito! Se verá un fino anillo solar alrededor de la silueta oscura de la Luna: un eclipse anular. Ésta es una simulación de cómo se verá.
Ojo, lo que veas dependerá de donde estés. El eclipse anular sólo se verá desde una estrechísima franja que cruza la Patagonia a la altura del sur de Chubut. Desde el resto del país, y casi desde toda Sudamérica, se verá un eclipse parcial, con el Sol menos eclipsado cuanto más lejos estés de Chubut...
Por ejemplo, así se verá desde Bariloche (un lindo eclipse parcial con el 83% del Sol oculto a las 10:34) y desde Facundo, 700 km al Sur, con el 97% eclipsado a las 10:38. En este link pueden clickear en el mapa para ver las circunstancias locales que les interesen.
¡No se lo pierdan! En una nota anterior explicamos cómo observar el eclipse de manera segura...
La distancia a la Luna está calculada y graficada con WolframAlpha.
El resultado es que la Luna, en el momento del eclipse, no alcanzará a tapar el Sol por completo ¡por muy poquito! Se verá un fino anillo solar alrededor de la silueta oscura de la Luna: un eclipse anular. Ésta es una simulación de cómo se verá.
Ojo, lo que veas dependerá de donde estés. El eclipse anular sólo se verá desde una estrechísima franja que cruza la Patagonia a la altura del sur de Chubut. Desde el resto del país, y casi desde toda Sudamérica, se verá un eclipse parcial, con el Sol menos eclipsado cuanto más lejos estés de Chubut...
Por ejemplo, así se verá desde Bariloche (un lindo eclipse parcial con el 83% del Sol oculto a las 10:34) y desde Facundo, 700 km al Sur, con el 97% eclipsado a las 10:38. En este link pueden clickear en el mapa para ver las circunstancias locales que les interesen.
¡No se lo pierdan! En una nota anterior explicamos cómo observar el eclipse de manera segura...
La distancia a la Luna está calculada y graficada con WolframAlpha.
11/02/2017
¿Cuál es el mejor telescopio?
¿Papá Noel, o los Reyes Magos, te trajeron un telescopio? ¿Es chiquito, y no sabés qué vas a poder observar? En el Cielo las Estrellas te ayuda con este decálogo.
1. El mejor telescopio no es el más grande, sino el que más se usa.
2. Olvidate de usar mucho aumento. Tu telescopio funcionará mejor con poco o mediano aumento (50 o 100 aumentos, ponele). En particular, si tenés una lente de Barlow, te servirá de poco. No te preocupes, el aumento no importa. Leete las notas ¿Me compro un telescopio? y Razón focal.
3. Tan importante como el telescopio es la montura. Muchos telescopios de calidad pasable tienen pésimos trípodes, soportes y monturas. Si te las arreglás para mejorar la montura, vale la pena. Tiene que ser firme, libre de vibraciones y moverse suavemente. Googleá, pensá, y algo se te va a ocurrir.
4. A observar por el telescopio se aprende. No te asustes, no es nada del otro mundo, lo aprende uno mismo prestando atención: dónde poner el ojo, qué hacer con el otro ojo, qué hacer con las luces de la ciudad, cómo acomodar el cuerpo para no cansarse. Es cuestión de estar atento, y lo aprende uno mismo con práctica y paciencia si realmente lo quiere hacer.
5. Descargate Stellarium. Es muy fácil de usar para un principiante. No te olvides de configurar el sitio de observación. Tené en cuenta que no conviene usar una pantalla durante la observación (ni PC, ni tablet, ni teléfono), porque se pierde la adaptación del ojo a la oscuridad, que lleva unos 15 a 20 minutos en lograrse. Pero te puede servir para prepararte para observar a la noche o cuando deje de llover...
6. ¿No sabés qué observar en el cielo? Andá a la nota Veo, veo... ¿Qué ves? para empezar. Las grandes nebulosas de Orión y de Carina se ven a simple vista (incluso desde el centro de Bariloche), así que no tendrás problemas en encontrarlas y por supuesto se verán muy bien con tu pequeño telescopio. Buscá también los cúmulos globulares Omega Centauri y 47 Tucanae. Y las nubes de Magallanes. Y aprendete qué son, dónde están, cómo viven. Buena parte del disfrute de la observación está en entender lo que uno está viendo.
7. Agarrá los libros que no muerden. Libros recomendables son el Manual del Astrónomo Aficionado, de Enzo De Bernardini, Exótico Cielo Profundo, de De Bernardini y Ferraiuolo, Astronomía, de Ian Ridpath, Observar el Cielo, de David Levy, la Guía de campo de las estrellas y los planetas, de Jay Pasachoff, Astronomía para chicos y no tan chicos, de Diego Galperin...
8. La Luna se ve buenísima con cualquier telescopio, inclusive con el tuyo. No esperes la Luna llena: las mejores fases son las que permiten ver el relieve de la superficie, con el Sol rasante. Además, ¡cada día la iluminación es distinta! Para no perderse en la Luna, lo mejor es el Virtual Moon Atlas junto al telescopio (acá la adaptación a la oscuridad no importa).
9. La Luna es fácil de encontrar en el cielo. El resto, ¿no tenés idea dónde buscarlo? Podés comprarte un libro con cartas, o imprimir las que necesites para la noche, y usarlas con una linterna de led rojo tenue. Hay varias notas en el blog que te pueden ayudar: Encontrar las cosas en el cielo y sucesivas. Para imprimir cartas, mejor que Stellarium es Cartes du Ciel.
10. Observar desde un sitio oscuro es por supuesto mucho mejor que desde una gran ciudad. Pero observar desde un sitio seguro es mejor todavía. Siempre llevá abrigo, inclusive en verano.
1. El mejor telescopio no es el más grande, sino el que más se usa.
2. Olvidate de usar mucho aumento. Tu telescopio funcionará mejor con poco o mediano aumento (50 o 100 aumentos, ponele). En particular, si tenés una lente de Barlow, te servirá de poco. No te preocupes, el aumento no importa. Leete las notas ¿Me compro un telescopio? y Razón focal.
3. Tan importante como el telescopio es la montura. Muchos telescopios de calidad pasable tienen pésimos trípodes, soportes y monturas. Si te las arreglás para mejorar la montura, vale la pena. Tiene que ser firme, libre de vibraciones y moverse suavemente. Googleá, pensá, y algo se te va a ocurrir.
4. A observar por el telescopio se aprende. No te asustes, no es nada del otro mundo, lo aprende uno mismo prestando atención: dónde poner el ojo, qué hacer con el otro ojo, qué hacer con las luces de la ciudad, cómo acomodar el cuerpo para no cansarse. Es cuestión de estar atento, y lo aprende uno mismo con práctica y paciencia si realmente lo quiere hacer.
5. Descargate Stellarium. Es muy fácil de usar para un principiante. No te olvides de configurar el sitio de observación. Tené en cuenta que no conviene usar una pantalla durante la observación (ni PC, ni tablet, ni teléfono), porque se pierde la adaptación del ojo a la oscuridad, que lleva unos 15 a 20 minutos en lograrse. Pero te puede servir para prepararte para observar a la noche o cuando deje de llover...
6. ¿No sabés qué observar en el cielo? Andá a la nota Veo, veo... ¿Qué ves? para empezar. Las grandes nebulosas de Orión y de Carina se ven a simple vista (incluso desde el centro de Bariloche), así que no tendrás problemas en encontrarlas y por supuesto se verán muy bien con tu pequeño telescopio. Buscá también los cúmulos globulares Omega Centauri y 47 Tucanae. Y las nubes de Magallanes. Y aprendete qué son, dónde están, cómo viven. Buena parte del disfrute de la observación está en entender lo que uno está viendo.
7. Agarrá los libros que no muerden. Libros recomendables son el Manual del Astrónomo Aficionado, de Enzo De Bernardini, Exótico Cielo Profundo, de De Bernardini y Ferraiuolo, Astronomía, de Ian Ridpath, Observar el Cielo, de David Levy, la Guía de campo de las estrellas y los planetas, de Jay Pasachoff, Astronomía para chicos y no tan chicos, de Diego Galperin...
8. La Luna se ve buenísima con cualquier telescopio, inclusive con el tuyo. No esperes la Luna llena: las mejores fases son las que permiten ver el relieve de la superficie, con el Sol rasante. Además, ¡cada día la iluminación es distinta! Para no perderse en la Luna, lo mejor es el Virtual Moon Atlas junto al telescopio (acá la adaptación a la oscuridad no importa).
9. La Luna es fácil de encontrar en el cielo. El resto, ¿no tenés idea dónde buscarlo? Podés comprarte un libro con cartas, o imprimir las que necesites para la noche, y usarlas con una linterna de led rojo tenue. Hay varias notas en el blog que te pueden ayudar: Encontrar las cosas en el cielo y sucesivas. Para imprimir cartas, mejor que Stellarium es Cartes du Ciel.
10. Observar desde un sitio oscuro es por supuesto mucho mejor que desde una gran ciudad. Pero observar desde un sitio seguro es mejor todavía. Siempre llevá abrigo, inclusive en verano.
04/02/2017
Elogio de la penumbra
La órbita de la Luna está un poco inclinada con respecto a la órbita de la Tierra, y por eso no hay eclipses de Sol todas las lunas nuevas ni de Luna todas las lunas llenas. Los eclipses sólo se producen cuando la línea de intersección de los dos planos orbitales (la línea de nodos) apunta hacia el Sol, dos veces por año. Esta línea va rotando lentamente, así que casi siempre se producen 2 o hasta 3 eclipses seguiditos, luna-sol-luna o sol-luna-sol, en el transcurso de un mes. La semana que viene, en preparación del gran eclipse anular del 26 de febrero (durante la luna nueva), tendremos un lindo eclipse penumbral de Luna (durante la luna llena). Será visible desde la Argentina al comienzo de la noche. El máximo eclipse será a las 21:44 del 10 de febrero, hora argentina, mirando al Noreste.
¿Qué significa penumbral? Miren cualquier sombra: nunca el borde es perfectamente nítido, siempre hay una zona intermedia. Es la penumbra, y se debe a que la fuente de luz no es un punto. En la penumbra la fuente de luz está parcialmente tapada por el objeto que hace la sombra, mientras que en la sombra (la umbra) la fuente está completamente tapada. La sombra de la Tierra también tiene una penumbra, que en esta figura hecha con Cartes du Ciel vemos como una corona rojo oscuro alrededor de la umbra central. Durante el eclipse del 10 de febrero la Luna sólo recorrerá la penumbra de la Tierra.
En general los eclipses penumbrales no son de gran interés, porque la penumbra de la Tierra no es muy oscura y pasan casi desapercibidos. Pero fíjense que en esta ocasión el eclipse será lo más penumbral (¿o lo menos penumbral?) posible. Lo que quiero decir es que la Luna rozará el borde de la umbra. La oscuridad de la penumbra no es uniforme, así que la Luna se verá bastante brillante de un lado, y oscura del otro. El lado oscuro de la Luna, tomá.
Los eclipses de Luna son todos distintos, y si hay un eclipse penumbral que valga la pena observar es éste. Así que no puedo más que recomendar observarlo, especialmente con binoculares, y sacar lindas fotos...
Ejercicio: En la figura puede verse que el ancho de la penumbra de la Tierra es igual al tamaño de la Luna. ¿Por qué ocurre esto?
El título de la nota, por supuesto, hace referencia al libro poético de Borges Elogio de la sombra, que no es mi favorito. Me he enterado de que hay también un manifiesto estético japonés del mismo nombre.
¿Qué significa penumbral? Miren cualquier sombra: nunca el borde es perfectamente nítido, siempre hay una zona intermedia. Es la penumbra, y se debe a que la fuente de luz no es un punto. En la penumbra la fuente de luz está parcialmente tapada por el objeto que hace la sombra, mientras que en la sombra (la umbra) la fuente está completamente tapada. La sombra de la Tierra también tiene una penumbra, que en esta figura hecha con Cartes du Ciel vemos como una corona rojo oscuro alrededor de la umbra central. Durante el eclipse del 10 de febrero la Luna sólo recorrerá la penumbra de la Tierra.
En general los eclipses penumbrales no son de gran interés, porque la penumbra de la Tierra no es muy oscura y pasan casi desapercibidos. Pero fíjense que en esta ocasión el eclipse será lo más penumbral (¿o lo menos penumbral?) posible. Lo que quiero decir es que la Luna rozará el borde de la umbra. La oscuridad de la penumbra no es uniforme, así que la Luna se verá bastante brillante de un lado, y oscura del otro. El lado oscuro de la Luna, tomá.
Los eclipses de Luna son todos distintos, y si hay un eclipse penumbral que valga la pena observar es éste. Así que no puedo más que recomendar observarlo, especialmente con binoculares, y sacar lindas fotos...
Ejercicio: En la figura puede verse que el ancho de la penumbra de la Tierra es igual al tamaño de la Luna. ¿Por qué ocurre esto?
El título de la nota, por supuesto, hace referencia al libro poético de Borges Elogio de la sombra, que no es mi favorito. Me he enterado de que hay también un manifiesto estético japonés del mismo nombre.
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