12/10/2024

Un anillo para atraerlos a todos

«One Ring to rule them all, one Ring to find them,
One Ring to bring them all, and in the darkness bind them.
»
J.R.R. Tolkien, The Lord of the Rings

El eclipse solar del 2 de octubre pasado fue mi tercer eclipse anular, después del de 2012 y el de 2017. Tras varios días de tempestad, con nieve incluida, el cielo se despejó y los visitantes del Parque Patagonia pudimos disfrutarlo en toda su espectacularidad.

En la foto vemos la silueta de la Luna completamente contenida en el disco solar, en el momento medio del eclipse. Es una cosa preciosa de ver en una foto, y más aún de experimentarla en vivo, con nuestros propios ojos. Una visión casi mágica, increíble, ver el Sol convertido en un anillo dorado durante más de cuatro minutos. 

El eclipse entero duró casi tres horas, desde que la silueta lunar comenzó a reptar sobre el Sol, produciendo dos puntas que fueron separándose durante más o menos una hora, y luego empezaron a juntarse más y más, y cada vez más rápido, hasta fundirse en un punto irregular y formar el anillo.

Y luego, de manera asimétrica, las puntas volvieron a formarse y el eclipse se desarmó...

Este eclipse fue el quinto de una increíble racha de una década con seis eclipses solares, entre totales y anulares, que cruzan el territorio argentino. 


Siete, si contamos el eclipse solar de 2010 que se vio desde El Calafate mientras Iniesta metía el gol que le dio a España su primer Mundial de fútbol, en Sudáfrica. No fui porque era en julio, con el Sol a un grado sobre el horizonte, y quién se iba a imaginar que estaría despejado. Bueno, estuvo. Tampoco pude ir al de la Antártida en 2021: ni la Armada ni el Instituto Antártico quisieron llevarme a la Base Orcadas, por dudosos motivos epidémicos. Pero estuve en cuatro, y seguramente no me perderé el último, en 2027, que pasa muy cerquita de Bariloche. Cuando termine esta racha, vienen décadas y décadas sin eclipses totales en la Argentina, hasta el 2064, si bien hay uno anular en 2034 en el norte del país.

Como se ve en las fotos, la superficie del Sol estaba decorada por muchas manchas el día del eclipse, que hicieron todavía más atractiva la (laaaarga) progresión de la fase parcial. Es la situación normal en los años alrededor del máximo de actividad solar. Revisé las imágenes del Solar Dynamics Observatory, un telescopio espacial dedicado al Sol, que toma imágenes cada 15 minutos, para verlas en detalle. 


Esta imagen está muy reducida, asi que comparto un par de recortes para que se vea la riquísima estructura que tienen estas regiones, donde el campo magnético es más intenso y la temperatura de la materia solar es unos 1000 grados más fría, que es la razón por la cual las vemos más oscuras que el resto del Sol. Primero, un recorte del enorme "archipiélago" que ondulaba una línea de latitud en el hemisferio sur solar:

Y la siguiente es la gran mancha que estaba apareciendo por el borde occidental del Sol el día del eclipse, y que puede verse en la foto del anillo que puse al principio:

Todas estas manchas son inmensas, mucho más grandes que nuestro planeta entero. Son las regiones activas donde se producen las grandes erupciones llamadas eyecciones de masa coronal, como la que vimos en el eclipse total de 2020. El Sol y su energía son muy impresionantes.

Hay más cosas para comentar sobre el eclipse, pero quedarán para la semana que viene. Para terminar elegí esta foto, de algunos de los muchos guanacos que vimos en el Parque Patagonia. Me pregunto si habrán notado algo raro en la luz durante el máximo del eclipse, algo que era evidente para nosotros. Son uno de mis animales favoritos, y están más presentes en mi trabajo científico que el Sol y la Luna.



Las fotos del eclipse, y la de los guanacos, son mías, pero se las presto. Las del SDO son de NASA/SDO. Los mapitas de la década eclipsada son de timeanddate, buenísimo sitio.

Además de guanacos, vimos choiques, zorros, flamencos, cauquenes comunes (distintos de los de Bariloche, que son los reales), loicas, un águila mora, un milano blanco, un halconcito colorado, y algunos otros rapaces no identificados, más las familiares bandurrias, caranchos, chimangos, teros y escarabajos (Nyctelia circumundata, creo).

05/10/2024

El cometa retrógrado


Se lo promocionó como "el cometa del siglo", de manera totalmente injustificada. Pero el cometa Tsuchinshan-ATLAS se convirtió, al acercarse a su perihelio (máxima aproximación al Sol) en un lindo cometa, apenas visible a simple vista. Quizás "el cometa del año". En Bariloche, tras una racha de mal tiempo que culminó con tres días de nieve durante el equinoccio de primavera, pudimos verlo finalmente el día 23 de septiembre. Convalesciente de un fuerte resfrío, no pude moverme de casa. Por suerte las circunstancias del cometa lo pusieron en el cielo del amanecer, así que pude verlo asomado al balcón.

El cometa muestra una linda cola en binoculares y en fotos, de un par de grados de largo, apenas distinguible a simple vista. Compite, por supuesto, con la claridad del amanecer. A medida que el cometa sube en el cielo y se despega de la atmósfera densa del horizonte, también se acerca el amanecer y el cielo se vuelve más brillante. El día 25 pude verlo con más facilidad, y cada vez más lindo:


En estos días el cometa está pegando la vuelta en su apretada órbita parabólica, en forma de horquilla, y como su movimiento es retrógrado, nos lo estamos cruzando de frente, mientras pasa delante del Sol. Dentro de poco se producirá el máximo acercamiento a la Tierra, el 12 de octubre. Al adelantarnos, lo veremos aparecer nuevamente, pero esta vez en el cielo vespertino, como hace unos meses cuando empezó a aparecer en los medios de prensa.

Mencioné su órbita parabólica, abierta, muy inclinada y retrógrada, típica de un cometa no periódico de la nube de Oort. Esta es su primera visita a las regiones interiores del sistema solar, y viene cargado de hielos vírgenes, que jamás sintieron el calorcito del Sol. Esto hace que probablemente produzca mucho gas y polvo a su alrededor, y lo que vimos en septiembre parece indicar que será un cometa brillante (si bien tendrá que competir con la Luna gibosa creciente). Ojalá se convierta en un "gran cometa", es decir, en un cometa que es obviamente visible a simple vista, por todo el mundo, sin necesidad de binoculares o siquiera saber hacia donde mirar. Seguramente no será el cometa del siglo: el cometa del siglo ya lo vimos, fue el McNaught de 2007. Qué cometa, ese.

En todo caso, las cosas que he visto decir sobre el Tsuchinshan-ATLAS, más allá de la tontería del "cometa del siglo", o que "sobrevoló Córdoba", me han dejado boquiabierto, patitieso y turulato. He leído, en una misma nota, que es un cometa no periódico, que no se acerca a la Tierra desde hace 80 mil años, y que no volverá hasta dentro de 26 mil años. ¿En qué quedamos? ¿Es no periódico, o tiene un período de 80 mil años, o tiene un período de 26 mil años? ¿No leen lo que escriben? ¿No razonan? Qué lejos quedaron los tiempos en que un periodista como Jonathan Swift usaba las leyes de Kepler para "inventar" un par de lunas de Marte (que resultó que existían), o cuando un poeta como Edgar Alan Poe explicaba correctamente que la noche era oscura porque el universo tenía un principio, o cuando un periodista y poeta como Leopoldo Lugones filosofaba sobre las ideas de Einstein

Bueno, una vez que pase el perigeo elegiré la mejor foto que tenga, para agregar a Tsuchinshan-ATLAS a la página de Los cometas de mi vida, que es tan popular en el blog.



La foto del cometa McNaught sobre Bariloche es de mi amigo Martín Moliné. ¡Síganlo! Martín siguió fotografiando el Tsuchinshan-ATLAS unos días después que yo, y me contó que estaba cada vez más brillante. Veremos dentro de unos días.

El diagrama de la órbita es de Gideon van Buitenen, que mantiene un lindo sitio con información actualizada de manera automática sobre cometas brillantes. La tomé de la página sobre el cometa Tsuchinshan-ATLAS y la adapté.

28/09/2024

La Luna y el Sol

Si estás buscando información sobre el eclipse solar, está en la nota de la semana pasada: Nuevo eclipse anular patagónico.

Durante el eclipse de Sol de esta semana, la Luna se encuentra en la parte más lejana de su órbita, de manera que no llegará a ocultarlo por completo. Hace media órbita, en cambio, la Luna llena fue una superluna, que nos encantó con un mini eclipse. En Bariloche estuvo bastante nublado, y encima yo estuve con fiebre, así que no lo disfruté mucho. Hice unas fotos, no muy destacables, pero las comparto igual para hacer un comentario.


La imagen de la derecha es de las 23:30, cuando el eclipse todavía faltaban 15 minutos para el máximo, pero las nubes ya dificultaban hacer una foto nítida. La de la izquierda es la luna llena antes del eclipse. Hay algo notable en la luna llena: no parece una esfera, parece chata. Si la Luna reflejara la luz solar como un espejo, la parte del medio debería verse más brillante que el borde, ya que las regiones del borde las vemos inclinadas desde nuestra perspectiva, y una parte de la luz incidente se perdería en el espacio. A pesar de esto, la iluminación de Sol no da la ilusión de estar viendo un globo. El efecto se debe a que el polvo lunar funciona como un retrorreflector (por razones que no están del todo claras). Se suma el hecho de que, en la Luna llena, no vemos ninguna sombra proyectada por el relieve lunar.

Por el contrario, el Sol se ve distinto:

El Sol muestra un oscurecimiento en el borde que refuerza la impresión de que se trata de un globo. En el caso del Sol, no hay reflexión de luz como en la Luna. La luz viene de la superficie caliente. Pero la superficie no es opaca, sino que es un poco transparente, y vemos algo de luz que sale de adentro. La que vemos viniendo del medio del disco atravesó menos "atmósfera solar", y la vemos un poco más brillante que la cercana al limbo. Hace 100 años, cuando se estaba desarrollando la teoría del funcionamiento de las estrellas, el oscurecimiento del limbo solar fue una importante pista de cómo había que formular matemáticamente el transporte de energía en el interior de las estrellas.

Mañana viajamos a Santa Cruz para ver el eclipse solar. Si estás en Perito Moreno, no te pierdas las actividades que ha organizado el Proyecto Miradas al Cielo, incluyendo una charla mía el día 1 por la tarde, en la Hostería Municipal. Más información aquí: Eclipse anular 2024. Esperemos que el tiempo patagónico no sea muy hostil.

21/09/2024

Nuevo eclipse anular patagónico

Acompañando el eclipse lunar de la semana pasada, y completando la segunda temporada de eclipses del año, tendremos un eclipse solar el día 2 de octubre. Como la Luna se encontrará en el punto más alejado de su órbita, no alcanzará a tapar el Sol por completo, y el eclipse se verá como anular, desde una ancha franja que cruza la Patagonia a la altura de la provincia de Santa Cruz:


Algunos recordarán que ya tuvimos un evento de este tipo, en el año 2017, cuando la franja de anularidad cruzó el continente a la altura de Chubut. En aquella ocasión el anillo visible de Sol fue muy estrecho, una cosa extraordinaria. Ahora no será tan finito, pero de todos modos es algo muy lindo de ver:

Desde casi toda Sudamérica se podrá ver el eclipse parcial. La hora del comienzo, el máximo y el fin dependen del lugar exacto de donde observemos. Pueden revisar en diversos servicios si quieren saberlo con exactitud. Hoy en día, recomiendo timeanddate.com, y la aplicación para el celu Eclipse Calculator 2.0, que es una belleza desarrollada por la Universidad de Barcelona.


Indicativamente, dejo las circunstancias para Bariloche, que sirven aproximadamente para toda la Argentina.

Comienzo: 15:59 (Sol a 40 grados de elevación, hacia el NO)
Máximo: 17:26 (Sol a 26 grados, bajando hacia el ONO, cubierto el 77% del diámetro)
Fin: 18:44 (Sol bajito a 12 grados, hacia el O)


El Sol se encuentra en el máximo de su actividad, algo que ocurre cada 11 años, y su superficie estará llena de grandes y complejas manchas solares. A medida que progrese el eclipse veremos cómo la Luna las va cubriendo, lo cual le agregará encanto al evento.

Vale la pena recordar que NUNCA debe observarse el Sol directamente, ni a simple vista y mucho menos a través de un telescopio o binoculares. Puede observarse usando filtros adecuados: anteojitos de eclipse, vidrios de máscara de soldar número 12 o superior, o filtros especiales que se venden para los instrumentos. No usar ni radiografías, ni anteojos de Sol, ni papel de regalo, ni ninguna otra solución improvisada.

También se puede proyectar el Sol usando binoculares o pequeños telescopios. Es muy fácil y seguro, y lo hemos explicado más de una vez. Y no olvidarse de usar una espumadera o colador, para ver múltiples solcitos eclipsados en su sombra.


 

Radiografías, películas veladas, vidrios de botella o ahumados, anteojos de sol, papel de regalo, máscaras de soldar de número menor que 12... 
NO SON SEGUROS Y PUEDEN PRODUCIR UN DAÑO GRAVE E IRREVERSIBLE EN LA RETINA.

Tomen precauciones, estén atentos a lo que hagan los niños, ¡y no se pierdan el eclipse!