05/02/2022

Verdura cometaria

Por diversas razones no pude hacer observaciones telescópicas del lindo cometa que adornó los cielos australes durante las fiestas de fin de año 2021, C/2021 A1 Leonard. Sólo alcancé a hacer unas pocas fotos con el objetivo fotográfico, nada comparable a las detalladísimas fotos que pudimos ver en las redes sociales. Desde playas al este de Bariloche hice esta linda toma con el cometa descendiendo sobre el cerro Catedral y la ciudad.

Ese día Leonard estaba en el Terebellum, es decir el cuadrilátero, un asterismo con forma parecida a la Cruz del Sur que forma la grupa, o la cola, de la parte equina de Sagitario

Estrictamente, desde hace unos años Terebellum designa solamente a la estrella de abajo en esta foto, Omega Sgr, de magnitud 3.9. La colorada de arriba es c Sgr, de magnitud 2.2. El cometa, como se ve, tenía una magnitud comparable a la de estas estrellas, y se lo veía a simple vista. En la foto, si bien enrojecida por la proximidad del horizonte y las luces urbanas, se distingue que la coma (la nubecita que rodea el núcleo) es de color verde, como vimos en muchas mejores fotos. Por ejemplo, esta es una de las que hizo Javo Fabris el mismo día.


Podemos ver que la coma es verde, pero la cola no. ¿A qué se debe esto? La cola es blanca porque es de polvo y refleja la luz del Sol. Hemos visto en otros cometas, como el Hale-Bopp por ejemplo, que una segunda cola de los cometas es generalmente azul, formada por un plasma fluorescente de monóxido de carbono que brilla excitado por la radiación UV del Sol. Tiene una dinámica distinta de la cola de polvo, y por eso las vemos separadas al alejarse del núcleo.

El color verde de la coma también es una fluorescencia, pero de una sustancia inusual: el carbono diatómico C2. A diferencia de los familiares gases atmosféricos N2 y O2, el dicarbono sólo existe en ambientes de muy baja densidad, o muy energéticos, debido a que es muy reactivo y desaparece rápidamente. El genial espectroscopista Gerhard Herzberg (premio Nobel 1971) conjeturó, en 1930, el mecanismo por el cual el dicarbono que pinta de verde la tenue atmósfera de los cometas era destruído por la radiación antes de alcanzar la cola. Por su parte, los astrónomos calculaban que la delicada molécula no persistía más de 100000 segundos (poco más de un día) a una distancia de 1 unidad astronómica del Sol. Pero jamás se lo había podido estudiar en el laboratorio, e incluso su descripción teórica es complicada, y no libre de controversias. 

Coincidentemente con la visita de Leonard con su verde cabellera, se publicó el primer estudio del C2 en condiciones controladas de laboratorio, analizando su color, sus interacción con la radiación electromagnética, sus transiciones electrónicas y su duración. El principal resultado confirma la observación empírica de los astrónomos: el C2 dura 160000 segundos (dos días) a 1 unidad astronómica del Sol. También se observa que es destruída de una manera complicada, absorbiendo dos fotones y sufriendo dos transiciones "prohibidas". El mecanismo es exactamente el que predijo Herzberg hace 90 años. El color verde de la coma de los cometas está explicado. Check. 


El trabajo es: Jasmin Borsovszkya et al., Photodissociation of dicarbon: How nature breaks an unusual multiple bond. PNAS (2021) 118:e2113315118.

1 comentario:

  1. Hermosas imágenes del cometa, y bien marcado el color verde de su coma; y excelente artículo, como siempre; a mí en particular, me emocionan mucho estas historias científicas, donde explican un fenómeno, y se demuestra en forma experimental décadas más tarde; y en este caso, qué maravilla que la demostración experimental sea tan reciente,
    buenos cielos !

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