13/05/2023

Polaris Australis

En el hemisferio norte, una estrella muy cercana al Polo Norte Celeste permanece inmóvil hora tras hora, noche tras noche, a medida que la Tierra gira sobre su eje (también de día, obvio, pero no se la ve). Navegantes y exploradores, en mar y en tierra firme, se han valido de ella para orientarse desde tiempos remotos. Hoy en día tiene más fama que usos: es Polaris, la Estrella Polar, la Estrella del Norte. Mucha gente cree que es muy brillante, incluso que es la estrella más brillante del cielo nocturno. Nada de eso: Polaris es una estrella de segunda magnitud, número 48 en la lista de las estrellas más brillantes. Tampoco está absolutamente quieta. Se encuentra a tres cuartos de grado del polo exacto (una luna y media), así que describe un pequeño circulito con la rotación de la Tierra.

En el hemisferio sur no hay una estrella brillante tan bien ubicada como Polaris. Pero sí hay una estrella polar, una Polaris Australis. Es casi imposible verla a simple vista (magnitud 5.5), así que nunca sirvió como estrella de navegación. Los pueblos antiguos encontraban el sur valiéndose de la Cruz del Sur. Pero es fácilmente visible con binoculares, y muy conveniente para poner en estación monturas ecuatoriales (especialmente las pequeñitas para cámaras fotográficas). En una foto de larga exposición, todo el cielo austral gira alrededor de ella (en sentido horario, advierto a los lectores del hemisferio norte):


Pucha, el Polo Sur Celeste realmente parece vacío. ¿La ven, a la estrella inmóvil? Tal vez no sea la que les pareció. La voy a marcar:

Polaris Australis es Sigma Octantis en la nomenclatura de Bayer. Forma parte de un asterismo en forma de trapecio que sirve para identificarla en medio de unas cuantas otras estrellitas de similar magnitud:

En este recorte señalé también otra estrella, BQ Octantis, bastante más tenue y muy roja. Esta estrella de la rama asintótica de gigantes (rara clase S, como Pi Gruis) está todavía más cerca del polo exacto: a apenas un cuarto de grado. Debería llamarse Polarissima Australis (pero ese nombre ya lo tiene una galaxia). A ver si la encuentran con los binoculares. ¡Es más difícil!

Yo tengo una manera bastante fácil de encontrar Sigma Octantis. Hay que navegar un poquito, y es así:

Empezamos por la Nube Menor de Magallanes y el cúmulo globular 47 Tucanae, que todos los aficionados sabemos encontrar. Si nos imaginamos más o menos dónde está el polo sur celeste (usando la Cruz, por ejemplo), vamos de 47 Tuc cinco grados hacia el sur, hasta Beta Hydri (tercera magnitud, con binoculares es fácil de identificar). Otros 5 grados, y llegamos hasta una flechita de 3 estrellas que apunta convenientemente hacia el sur. Otros 5 grados y llegamos hasta el trapecio de Sigma Octantis. La identificamos porque es la que tiene dos estrellitas alineadas, formando como una manijita del trapecio, que también dibujé. Parece una plancha. Plancha Australis. Cinco grados es más o menos el campo de los binoculares que usamos los astrónomos (o tres dedos con el brazo extendido), así que es una navegación muy fácil. Tengan en cuenta que a distintas horas de la noche o épocas del año todo puede estar rotado alrededor del polo; verifíquenlo en Stellarium o el planetario favorito. Pero siguiendo la navegación que describí, no falla.

La foto está hecha en la playa occidental del lago Moreno, en Bariloche, con el cerro López al sur. Estas fotos de trazas estelares son fáciles de hacer: sólo hay que poner la cámara en un trípode y darle. Antes de la era digital hacíamos exposiciones largas, de media hora o una hora. Hoy en día hacemos muchas exposiciones más cortas (medio minuto, por ejemplo) y usamos una aplicación como Sequator o StarStaX para combinarlas. En este caso usé una lente ojo de pez, de sólo 8 mm de distancia focal, por eso el efecto es tan notable. Me dio ganas de hacer una más larga, pero voy a tener que esperar al año que viene.

Debido a un (muy lento) bamboleo del eje de la Tierra, llamado precesión de los equinoccios, los polos celestes van cambiando (muy lentamente) de posición en el cielo estrellado. Así que las estrellas polares no son para siempre. Estuve revisando el futuro y hay algunas polares australes interesantes. Algún día lo cuento.

1 comentario:

  1. David Batista13/5/23 14:59

    Se empieza por las estrellas, descubriendo maravillas (así empecé yo, cuando mi hija me recomendó ver los Pilares de la Creación de fecha 09/07/2022) y de pronto se descubre, aquí mismo, en este polvo tan maravilloso que está entre ese universo de estrellas y nos alberga, a los hermanos que durante tanto tiempo he ignorado por mi torpeza. Hace ocho días me asomé a ese mundo totalmente desconocido para mi, Bariloche. Me sentí tan desorientado en ese espacio, entre montañas apenas vislumbradas pero amadas de pronto como si fueran mías (nací, he vivido y sigo viviendo ente montañas de diversas geografías de México), que decidí buscar para conocer más sobre ellas. Llevo horas navegando en internet y he quedado deslumbrado: Bariloche, Río Negro, Patagonia, Argentina. Mis hermanos latinoamericanos que por torpeza ignoro cuando somos un mismo territorio, puntos de vista y culturas hermanas. Y de pronto el mundo se hace más pequeño y al mismo tiempo más grande: lo que está a miles de kilómetros lo tengo al alcance de unos cuantos clics en un ratón, pero ya no veo solamente mi nariz, ahora veo todo el cuerpo, que hará maravillas cuando actúe como esa unidad que pensaron algunos de nuestros antepasados. Y ya es otra visión que tengo sobre el Cielo Austral y sus estrellas, que contemplo codo a codo con mis hermanos del hermosísimo Bariloche y sus montañas, que todavía no acabo de identificar cuál es cuál. Volveremos a platicar en ocho días.

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