Sus contribuciones fueron muchas y variadas. Entre otras cosas, Huygens descubrió que los raros apéndices que Galileo había descubierto en el planeta Saturno eran en realidad un anillo. También descubrió Titán, el mayor de sus satélites (la sonda espacial Huygens descendió sobre Titán hace algunos años, tomando extraordinarias fotografías de un mundo sorprendentemente parecido a la Tierra). Su dibujo de la Gran Nebulosa de Orión es el más antiguo que existe de esta hermosa región del cielo.
Hacia el fin de su vida escribió un tratado sobre la posibilidad de vida en otros planetas, reconociendo el importante rol del agua líquida, tal como mencionábamos recientemente en conexión con los planetas extrasolares. Sus argumentos -entre estéticos y religiosos- eran muy distintos de los que esgrimen los exobiólogos modernos. Fíjense esto, que traduzco un poco libremente:
¿Acaso permitiremos en estos planetas sólo vastos desiertos, materiales sin vida y rocas inanimadas? ¿Los privaremos de toda criatura que aluda al Divino Arquitecto? ¿Los hundiremos por debajo de la Tierra en belleza y dignidad? Es algo que ninguna razón debe permitir.
Huygens contribuyó también en áreas de la matemática y la física como la teoría de las probabilidades, el cálculo infinitesimal y la mecánica.
Y esto va a sorprender a más de uno: ¡Huygens inventó el reloj de péndulo! Hoy en día casi en desuso (si bien todos lo conocemos), el reloj de péndulo fue el primer instrumento capaz de medir el paso del tiempo con precisión, y durante siglos fue el único. Acá hay una foto de uno de sus relojes y de su libro sobre el tema. Y a propósito de relojes, nos acercamos al tema anunciado en el título de esta nota: la sincronización...
Hoy en día es un campo muy activo y muy interdisciplinario, ya que el fenómeno de sincronización de osciladores existe en todas las áreas de la ciencia y a todas las escalas de la naturaleza. Desde los ritmos que marcan las reacciones químicas que ocurren dentro de las células, pasando por el movimiento coordinado de las células del corazón o de individuos que forman una muchedumbre, una bandada o un cardumen, hasta la rotación de la Luna sincronizada con su revolución alrededor de la Tierra y la forma de los anillos de Saturno (lo cual le habría encantado a Huygens), el fenómeno está por todos lados.
El estudio de la sincronización de osciladores es una de las áreas de investigación en mi grupo de trabajo, el Grupo de Física Estadística e Interdisciplinaria (FiEstIn para los amigos). Con la colaboración del Portal para educación media del Instituto Balseiro preparamos recientemente un breve video educativo sobre la sincronización, con comentarios y una demostración sencilla de laboratorio que ilustra muy bien el fenómeno. La pueden ver aquí o, más grande, en YouTube.
Dos comentarios finales, anticipándome a posibles reclamos:
1. No, la sincronización no es lo mismo que la resonancia (pero esto quedará para otro día...).
2. Las luciérnagas no se ven bien. Es verdad. No sé por qué. Una filmación impresionante es la que muestra David Attenborough en uno de los capítulos de la serie Trials of life. La BBC tiene un sitio para el capítulo pero los dos clips que muestran no incluyen a las luciérnagas... En YouTube se encuentran algunos clips, como éste del usuario khsfrst (es de noche, se llega a ver la silueta de un árbol, unas pocas luciérnaga volando, y un gran enjambre que están posadas en el árbol y que destellan sincronizadamente):
Que bueno e interesantísimo artículo. Se disfruta leyéndolo. Bah, algo a lo que siempre nos tienes acostumbrados.
ResponderEliminarUn agregado de algo que para mi sorpresa se da más seguido de lo que imaginaba: me refiero a la confusión que tienen algunas personas, y que a veces aparece incluso en textos relativamente serios, entre los apellidos de Huygens (1629-1695) y Huggins. El segundo, William Huggins, fue también un importante astrónomo, pero británico, que nació dos siglos después, en 1834 y murió en 1910.
En algunos textos de historia de la astronomía o de la física lo citan como "astrónomo nacido en 1629", atribuyéndole la obra del primero.
Coincido en Alejandro, es un buen artículo y más porque muestra un efecto que yo hasta ahora desconocía, que es la sincronización. La explicación es muy buena y clara.
ResponderEliminarGracias por el aporte. Saludos.
Hola Guillermo, muy buen aporte con el artículo. Y el video también me resultó de gran utilidad.
ResponderEliminar(Por otra parte, no sabía que una sonda había bajado a la superficie de Titán).
¡Saludos!
Hola Guillermo! Aunque me repita con los comentarios anteriores, el artículo y sobretodo el video me parecen excelentes!
ResponderEliminarAporto una curiosidad:
En Nederland (paises bajos) evocaron a Huygens, y en forma sugestiva a sus descubrimientos, en un billete de su moneda que puede verse en: http://www-personal.umich.edu/~jbourj/images/money/huygens12.jpg
Saludos!
Un ejemplo muy curioso de sincronización es cuando dos personas caminan agarradas de la mano. Sus pasos se sincronizan, y su uno los mira de costado, el movimiento de las piernas de cada uno es una réplica casi exacta, con la misma flexión de la rodilla y todo. En las plazas y los parques dos por tres aparecen parejas caminando así.
ResponderEliminarGracias por el dato, Joseinda. Voy a empezar a observar estos casos. Sin stalkear, se entiende.
EliminarQue hermoso artículo! Desconocía todo sobre el fenómeno de la sincronización, sin el cual, supongo, no habría vida, ni individual ni social. O al menos no sería igual. Vengo retrocediendo desde el presente hoy, cumpleaños 150 del metro, y me encuentro esta preciosura. Gracias Guillermo!
ResponderEliminarGracias por tu comentario, María. Veo que una de las imágenes está rota, voy a tratar de restaurarla.
Eliminar